El primer día de playa de tu bebé es uno de esos momentos especiales que quedan para el recuerdo. La primera vez que ven el mar, su primer contacto con la arena, su primer baño en el mar… Tener hijos y disfrutar del verano es compatible; puede ser una experiencia única, sobre todo para nuestro bebé, que tendrá la oportunidad de experimentar por primera vez un chapuzón.
Pero el verano esconde muchos peligros como, por ejemplo, el calor y el sol. Cosas con las que debemos tener mucha precaución, sobre todo si vamos a la playa con nuestro bebé, ya que pueden repercutir seriamente en su salud.
Precauciones a tener en cuenta
Los bebés no tienen la regulación del calor, es decir, la sudoración desarrollada, con lo que podría darle un golpe de calor fácilmente y sin que nos demos cuenta. Por eso es importante que sigas todos estos consejos e hidrates mucho a tu bebé en su primer día de playa:
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- Cuanto más pequeño sea vuestro hijo más protección necesitará; los niños y niñas menores de 6 meses no deben permanecer expuestos al sol.
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- La crema solar debe ser a prueba de agua. Extiéndela por su cuerpo (orejas, cuello, nariz y empeine de los pies) media hora antes de estar expuesto al sol y renovar cada 2 o 3 horas.
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- Existen marcas que venden ropa con protección solar y que, además, se secan rápidamente; así pueden actuar, a su vez, como ropa de baño.
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- Proteger sus ojos es igual de vital que proteger su piel; la arena y el agua reflejan los rayos ultravioleta, por eso es importante usar gafas homologadas si va a pasar mucho tiempo en la playa.
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- Llevar siempre calzado playero que evite que se le puedan hacer heridas en los pies y le protejan de la arena y el calor.
Primer día de playa de tu bebé: Diviértete jugando
La playa puede ser un lugar donde pasarlo en grande. Tan sólo hace falta seguir los consejos de seguridad y aprovechar los juegos que el lugar permite. Déjale que experimente (pero siempre con tu supervisión) con la arena haciendo formas, cavando, amontonando arena, o que sienta el agua de la orilla en sus pies y se familiarice con el entorno. Una buena opción en este caso es llevarte tu propia piscina infantil a la playa. De esta forma podrás tener controlado y fresquito a tu pequeño mientras se lo pasa en grande.
En INTEX te lo ponemos muy fácil ya que te ofrecemos una amplia variedad de piscinas hinchables transportables para hacer del primer día de playa de tu bebé uno de vuestros momentos más especiales. Elige la que más te guste, como la piscina hinchable INTEX 2 en 1, con dos tamaños de piscina en uno, o la piscina hinchable INTEX Pez, con una forma muy divertida y una cubierta especial para que a tu bebé no le de el sol mientras disfrutáis de la playa. Y si eres más de sus personajes favoritos, escoge la piscina hinchable Winnie The Pooh con cubierta ,¡será el más dulce de la arena!
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